miércoles, 20 de enero de 2010

Vértigo...

Y vuelvo al punto de partida, a echarte de menos incluso cuando estás, a querer noches oscuras y ojos cerrados para que estés y a sentir corriente de frío a mi lado constantemente. Ni siquiera una huida sería bastante, volverás, pero yo ahora, te echo de menos. Busco en mi vértigo y sólo me encuentro al filo del salto... al vacío.